martes, 17 de enero de 2012
EN TU AMBROSÍA
Mucha inspiraciòn,
inmensa poesìa,
lleva tu mensaje
de rasas prosas,
de goce perenne
de ambrosìa
que guarda mis
secretas cosas.
como el sonido
musical
el viento mueve mis rosas,
te miro
en el barandal,
en tu imagen
primorosa.
Asi quiero
verte siempre,
tarde,
madrugada
y dìa
ungida con valor
y temple
en mi corazón
y en tu
ambrosìa.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
TU CACHILAPERITO
Soy tu cachilaperito
amada de mi tierra,
eres mi amparito
que mi amor encierra.
Soy tu cachilaperito
que te ama y te aprecia
cuerpo y alma necia
que va por tu senderito.
Tu me puedes olvidar
y tu memoria recobro,
tu rostro he de besar
para quitarte el asombro.
y quisiera enamorarte
con mastranto sabanero
y bañarte con los aromas
de mi amor refranero.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
Sixto Alfonso Páramo Quintero
LA MEDIOCRIDAD DEMOCRATICA
En el árbol de mi fruto
escuálido, negro y ausente,
tirado al olvido y al luto
mi corazón firme sobresale,
con la fuerza emergente
para decirte en dulce furtivo,
que eres la razón de mi muerte
y el motivo de estar vivo.
Ya quisiera que mi llanto,
quitara el dolor del que sufre,
que mis ojos no viera
la inmundicia conciencia ajena,
propios del reino del azufre,
no de los que quiero y le rodea,
un sable por castigo le diera,
a este pueblo mío y sufrido,
que elige la guerra y la violencia
en lugar de la cultura,
la anticorrupción y la decencia.
Va mi vida como mi Colombia ?
por el vil despeñadero
apoyando el crimen
y la violencia matemática,
disfrazada de cincuenta mil
falsos positivos
de la mediocridad democrática?
Sixto Alfonso Páramo Quintero
TUS PALABRAS
TUS PALABRAS GRATIFICAN
MI RAZON DE VIVIR,
PALABRAS DE ORO
QUE EL TIEMPO NO BORRA,
SEMEMAS DEL CORAZON
ZARCIDAS POR LAS AUREAS FIBRAS
DE TU SENTIMIENDO GLORIOSO,
DEL AMOR
QUE ME PROFESAS,
DE LA INMENSIDAD
DE NUESTRO QUERER,
COMO LAS SIMPLES COSAS
TU HABLAR
DE BRUMOSO ZAFIRO
REFRESCAS
COMO ROSAS
EL PASADO,
EL PRESENTE Y
EL FUTURO COMO
LA BRIZNA DE TU SUSPIRO.
MAÑANA
Mañana será luminoso,
de encuentro y pasión
viernes amoroso,
de bálsamo y comunión.
Eres el fuego febril
edificante de la historia,
caminos de abril
común a nuestra memoria.
Somos seres unidos
de lunática roca,
por amor fortalecidos
en la paz reciproca.
Mañana en conjunción
pasión y fortunio,
viernes rojo y umbrío,
de amor en emanación.
Sixto Alfonso
LA INCERTIDUMBRE COMO DULCE DE LA ESPERA
Gracias, muchas gracias,
por todo lo vivido
por todo lo sufrido
y hemos de vivir
y hemos de sufrir
porque junto a ti,
como el devenir de anoche,
donde el amor
se hace mas amoroso
que el amor que nos espera,
conocí tu dicha
y tus razonados reproches,
soy culpable
de lo que tu pienses,
mis actos no dan para más,
quiero que perdone
quiero que me castigues
con noches como la de anoche,
para ser feliz más,
Si todo fuera dorado,
si todo lo de tuyo y lo mio
fuere un lugar esperado
nuestro amor
sentido no tuviera,
por que la incertidumbre
es el mejor dulce de la espera,
saber que eres mía,
y yo de nadie más,
que tu esperanza y la mía,
en el tejer amoroso de Sísifo,
andamos los dos,
en la noche construimos amor
para gastarlo en el día,
ese es nuestro amor
y nuestra porfía.
COMO EL PRIMER DIA
Gracias amor
por tu perseverancia,
tu me fortaleces
para esta causa y veo
la fuerza inmanente
de nuestro amor
en esta empresa.
Te pienso y
te recuerdo cada momento.
Tu entusiasmo
me ha contagiado.
me ha contagiado.
Te amo
hoy
como
como
ayer
ayer
como
antier
antier
como
trasantier
trasantier
como
trasantiayer
trasnatiayer
como
trastrasantiayer
trastasantiayer
como
el
primer
día.
COMO LOS AMORES DE LOS CAMINANTES
Las noches son largas
como los Pensamientos fijos,
el recuerdo sublime
mi tormento agranda.
Porque este destino
de noches de silencios
juega mi suerte al desatino,
de culpabilidad ajena y gritos míos.
La vida frágil llora
y las lágrimas esculpen
hondos caminos en la piel,
reverdece así las arrugas del alma.
Calvario de dolor
son mis noches sin ti,
no tengo fuerzas para olvidar,
tu presencia felíz.
Obligada no estás
a creer lo que te diga,
en mi siempre estás,
y nada tengo de ti.
Eres fuerte
porque olvidas y perdonas,
viven perenne así
mis propias heridas.
No merezco tu recuerdo
ni mis sufrimientos,
ni tu amor falso,
ni tu olvido vano
Me viste tu sombra
con grises iluminantes
que no se esconden como
Los amores de los caminantes.
EN LA CONCIENCIA
Al declinar la tarde lábil,
Cuando nuestras manos
juegan,
Creo tener y vivir un mundo
fácil,
Que por fácil parece
aburrido.
Esos besos que no mienten,
No pueden ser besos ni
sinceros,
Amo el peligro y a la mujer
que desprecia,
Un nido de amor de
mermeladas fingidas,
Gustar de un amor seguro y
fiel,
Es de apocados, inseguros e impíos
No hay goce mayor de miel,
al amor de animales bravíos
al amor de animales bravíos
Que destile odio, veneno o
hiel.
Con besos bígamos y
perjuros,
Que en la cama seas animal,
Con vibrante sexo de
conjuros.
MI PRESENTACIÓN EN COPLAS HUILENSES
Soy como los ríos, igual y
diferente siempre
Quien quiera rajaleñar, que se pare enfrente,
Que sea ágil en su copla y
que beba aguardiente,
Que crea en Dios y que no culpe a la gente.
Mi camino es no tener
ninguno,
Los animales husmean y
encuentran sus caminos,
Impregna tristeza
reconocerlo,
No reconozco ninguno.
No existe en mi, caminos
viejos,
Jamás vuelvo a mis amores
dejados,
Para cada instante de mi
vida,
Sobrevivo con caminos despejados.
Soy tan extrovertido,
Que me siento forastero de
mi mismo,
Engendro el desorden y tan
rebeldía avasallante,
Como la del que no se
obedece ni asimismo.
Para vencer el olvido, no
almaceno odios,
No gasto en desamar, por no
ser problema mío,
Un amor pasado, es baraja de cronopios,
Y no pido ser perdonado, parece
impío.
Nunca esforzarme por ser
aceptado,
Ser como se es, sin
desconsuelos,
Caiga bien o mal así sea mal
encarado
Ser rectos nos viene de los
abuelos.
No tengo sombras ni con
penas me acobardo,
No tengo suegra que me quiera, por impía
No tengo suegra que me quiera, por impía
Siempre dejo huella sin
haber pisado,
solo quiero la suegra de la
mujer mía.
Aquí ya mis coplas termino,
Dando chance de ser vencido,
Ninguno me sirve, porque
los aniquilo,
Mandándolos al diablo, su escogido camino.
lunes, 16 de enero de 2012
POR QUE NO ME GUSTAN LAS HETAIRAS
Alguna vez alguién me preguntó si tenía un día especial de suerte y no fue dificil que llegara a mis recuerdos varias notas dulces e históricas acaecidas un hermoso y nefasto jueves 11 de junio de 1992. Trabajaba como médico de campo, en la empresa de sísmica petrolera Grant Geophysical Corp. El día anterior habia volado desde Orito (Putumayo) a Bogotá en Helitaxi y de la capital colombiana al El Díficil (Magdalena), horas después a Corozal (Sucre) y por tierra a Sincelejo, directo al Hotel Panorama.
Me enfermé de pereza y con disculpas no fuí a trabajar ese jueves 11 de junio, pues estaba interesado en estar en la Posesión de Nel Beltrán Santamaria como primer Obispo de Sincelejo, a las 11 A.M. Fue un acto muy hermoso con mucha pompa eclecial, llena de seminaristas, monjes, cánticos, monjas y clérigos de todos los pelajes y pelambres. Por esa época el Padre Nel Beltrán Santamaría, era Alto Comisionado para la Paz, cargo que dejó años después, pero aún sigue de Primer Obispo de Sincelejo. De esa misa jamás olvidaré el gesto de un negrito que podríamos elegir como el Campeón Mundial en comer ostias de misa de consagración obispal, pues con Coca Cola en mano, comulgó 1248 veces, cuando le pregunté porque ese acto compulsivo de comulgar, esperaba que me dijera que era muy inclito o apegado a la fe religiosa, pero no, simplemente respondío: "Tengo mucha hambre desde hace tres semanas, encontré un poco de gaseosa y comulgué varias veces, pues quería algo de sal".
En las horas de la tarde, de ese mismo jueves 11 de junio de 1992, Rodolfo Blanco, héroe boxeril y crédito deportivo de San Onofre (Sucre) se coróno Campeón Mundial de Boxeo, pelea que fue transmitida en pantalla de lona gigante en el parque central de Sincelejo. Después de ese triunfo, el jolgorio, el ron, la champeta y sangre predominaron manchando tan magna celebración.
A las siete de la noche fui llamado por mi jefe al celular (un artefacto grande y pesado, que se calentaba a los dos minutos de conversación, uno podía hablar tranquilo, pues no se los robaban, ya que el ladrón se cansaba y era alcanzado al cargar con él), nos citó urgente al Hotel. Al llegar el ingeniero Jefe, nos dijo que teníamos que celebrar el triunfo de Rodolfo Blanco pero en una Salonera "Donde Yolanda", todo por cuenta de la compañía. Era sin discusión un sitio elegante y afamado como costoso, atendido por hermosas diosas de ébano, mas conocidas como putas, meretrices, barraganas, damisela o simplemente Hetairas.
El ron, los ritmos gestuales de caderas que aletean sinuosas augurando sexo y el baile pegadito estimulaban en forma rápida con los besos de carnosos labos, a dar rienda suelta de urgente visita a la curva húmeda que se abría como ramos de jacinto, no tanto por amor como por el interés al dinero.
Me tocó por suerte una negra de mediana estatura con una fronda cabellera que parecía mucho a Terense Williams. Y cuando estaba en el acmé de las filigranas lascivas pasando por los actos intracatameniales, la negra arrancó a llorar. Debo confesar que ese llanto agrandó mi orgullo varonil, pues nunca había hecho llorar a una mujer (alguna vez algo parecido pero fue al l intentar desflorar una gata) en relación sexual alguna, me bajé triunfador y miré el asta viril com si yo mismo fuera el Rey Príapo, culpable de tan maravillosa proeza, al calmar su llanto la negra, me encaramé de nuevo a asumir mi roll castigador y el llanto no se hizo esperar y fue para mi como una comprobación conclusiva, que era la defenestración de mi príapo, la causa de honroso llanto femenino. No sé porqué duda en mi nacida, ni por cual incertidumbre, en plena acción de las artes de colchón, le pregunté:¿ Por qué lloras ? y la negra me respondío: " Es que mataron a Rafael Orozco, en Barranquilla" y metiéndose la mano en la espesura de su afro, sacó un radio en forma de balaca, agregando: "Escucha tu también y me contá" sin duda en plena faena erectil, no estaba para radioescucha a plenas 9:30 de la noche. Y me pasa, eso a mi, que me las creía de ser curtido en tan profesionales experiencias.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
LOS SIETE NOMBRES TRISTES DEL AMOR
Cuando conozcas
los siete nombres
tristes del amor
se que me amará.
Cuando conozcas
el primero,
por siempre
te enamorarás.
Cuando conozcas
el segundo,
mi hermosa semilla
en tu vientre crecerá
Cuando conozcas
el tercero,
con eterna esperanza
te ilusionará
Cuando conozcas
el cuarto
de mis trillizos
no se olvidará.
Cuando conozcas
el quinto,
sollozando más
amor me solicitará.
Cuando conozcas
el sexto
del Gran Sixto
con brasas aclamará.
Cuando conozcas
el último
de ningún hombre
ni mi nombre recordará.
Sixto Alfonso Páramo Q. escrito el 01/09/1991
HISTORIA DE UNA AMISTAD MALEVA
Cuando la lotería de la vida te asigna un número en la que ésta nunca va a caer, es cuando uno se da cuenta de la desdicha, de la mala estrella al nacer donde no se debe nacer. La naturaleza tasó el destino para nacer en cuna honesta pero allende del lodo de las comunas negras, que son aquellas donde aparece todo lo se pierde en el resto de la ciudad. No creo que exista mas ladrones por kilometro cuadrado, de mi ciudad, que la comuna 7 de Neiva. Cuna de toda clase de delincuentes, se me volvían amigos de saludo a fuerza de verlos cotidianamente en sus malechorías y como una forma de defenderme de esa caterva delincuencial, con la esperanza de que con ese trueque de saludos no se metieran con uno.Hernán Cuéllar Verú*. sátiro de la carcajada fue capturado en 1982, ventiladoreño, 33 años, portador de un TBC, con alrededor de 30 violaciones consumadas. Tenía antecedentes penales por delitos contra la propiedad. Entraba en las casas seleccionadas, maniataba a todos, menos a la mujer elegida. Se hacía cocinar huevos pericos, se bañaba, pedía ropa limpia, conversaba con todos y ya vestido con la pijama del dueño de casa les aclaraba que no les haría daño. Después se recluía con la mujer en el dormitorio hasta el amanecer, cuando se iba.
No hay una sola teoría que pueda explicar la actividad delictiva de mi amigo Hernán y menos justificarla, ni tampoco hay una personalidad violenta o delincuente transmitida geneticamente, aunque la mayoría de los ladrones de esta comuna proceden de padres ladrones o delincuentes y pienso porqué que la conducta humana presenta tal variabilidad como la conducta delincuencial ?
Una vez intente entrarme en el alma de este delincuente para acercame a los trasfondos teóricos como explicar la biología del crimen de Lombroso, profesor italiano de mi gran Jorge Eliécer Gaitán Ayala (1898-1948), quien asigna los actos violentos en puntos específicos del cuerpo. Pero como explicar en el malvado las facultades o propiedades del alma como el amor, la ira y los impulsos sexuales en áreas del cuerpo y hasta el día de hoy se siguen investigando las variables intrínsecas y extrínsecas que puedan explicar los orígenes del comportamiento delincuencial.
Algunos creen que las teorías biopsicosociales son deterministas y socialmente peligrosas, son estos tres aspectos (lo biológico, lo psicológico y lo social), pueden tenerese en cuenta para hacer un análisis individual de la persona que comete delitos, como es nuestro caso el amigo Hernán, tambien conocido con el alias de EL CHUECO. Esto, sin dejar de lado otras explicaciones de la conducta criminal que vale la pena resaltar en él :
a. Dada para el individuo como él que delinque, como una forma de adaptación y supervivencia, sus crimenes señalan que sus conductas criminales persisten porque en sus ambientes evolutivos eran conductas que favorecían la adaptación y la capacidad de sobrevivir malamente a su propia adversidad.
b La teoría del bajo auto control, explica que la ausencia de auto control es causa suficiente y necesaria de la criminalidad, siempre y cuando exista la oportunidad fácil es imposible el autocontrol.
c. La rutina diaria de la vagancia consetudinaria hace que la probabilidad de delinquir o de que se cometa un delito se aumente y depende de tres factores. Un delincuente motivado (racional: necesidad de cubrir vicios, techo o comida), la presencia de un objetivo del delito accesible ( ocasión) y la ausencia de guardianes capaces de proteger el objetivo (falta o ausencia de seguridad).
Pero porque mi amigo Hernán es un violador o víctima de su elevadísima testosterona ? Será que es un enfermo y sufre de satiiriasis ? Él dice que no es un violador. que si acaso es un "ofensor sexual" inducido por los otros delitos que comete:" Cuando he planeado robar una casa, planeo toda la acción de asalto en la noche, la gente duerme y siempre lo logro, una vez adentro y en la oscuridad los cuerpos femeninos son mas hermosos y sus siluetas me inducen a violentarlas, poseyendolas sin saciedad" Con esa narración espeluznante, una versión punible de satiriasis, me hizo recordar a mis clases de psiquiatría y a analizar la historia de Sátiro, como conformante de un nombre benigno del violador. En la mitología greco-romana, se denominaba sátiro a cierto semidiós representado con largas orejas puntiagudas, pequeños cuernos sobre una cabeza calva, nariz aplastada, piernas de macho cabrío, pequeña cola y cuerpo cubierto de pelo. Los sátiros eran hermanos de las Ninfas, personificaban los instintos brutales, se los caracterizaba como cobardes, vagabundos, lascivos, maliciosos. Entraron desde el principio en el cortejo de Dionisio y dieron su nombre a un género dramático, el drama satírico. Escultores y pintores embellecieron paulatinamente el tipo tradicional de los sátiros, que se convirtieron en seres semejantes al hombre, pero conservando los cuernos y los pies con pezuñas. En la Edad Media se transformaron en los demonios obscenos de las leyendas cristianas que aparecían en los pórticos de tantas iglesias. En la década de 1980 en Colombia, a los violadores que salían en los diarios amarillos como El Caleño, El Bogotano y El Espacio, se los llamaba también sátiros.Tambien traigo a la memoria que históricamente una violación era considerada atendiendo al estatus de las personas involucradas. En determinados momentos tomar por la fuerza a mujeres de categoría considerada inferior era legítimo y aceptado. La concepción histórico-jurídica de la violación lesionaba dos bienes jurídicos: la honestidad de la mujer y la honra de los hombres relacionados con ella, injuriaba la fama de la mujer, pero especialmente la de los hombres emparentados con ella. La violación se ha utilizado también como un arma para humillar y controlar a los hombres, constituyendo un atentado contra el honor del hombre, del padre, del marido. En las leyes anglosajonas, la violación en el pasado fue un crimen contra la propiedad, porque se violaba el acceso exclusivo del marido a su propiedad sexual. Consciente o inconscientemente, un mundo de valores masculinos ha justificado, de hecho, la violación por “la natural virilidad agresiva” del hombre y la “pasividad masoquista” de la mujer, todas nociones provenientes de una suerte de fatalidad fisiológica.
He traído la historia de un amigo para mostrar que ellos pueden tener tambien un interprete y no piensen que mi intención en esta nota como apologia o desagravio a un delincuente, sino tratar de entender sus porqués.
* He cambiado el nombre, para no herir susceptibilidades.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
EL DOLOROSO PARTO DE ROSITA
Estaba cumpliendo mi servicio rural obligatorio, en la vereda Triunfo II, vereda del Municipio de San José del Guaviare, en esa época para un médico no había noches oscuras ni ríos crecidos, cuando se tratare de atender un paciente. Era las dos de la madrugada de una noche lluviosa, cuando me despertó Brisa Marina Diaz Melo, una auxiliar de enfermería inteligente y bella como ninguna otra en el mundo, pues inteligencia y belleza son cualidades que raras veces confluyen en un mismo ser, siendo ésta excepción, porque Brisitas, como era que la llamabamos, nos enseñó y nos enseña, que es amar al prójimo, que es responsabilidad y como debemos ser de calidosos los prestadores de servicios de salud en el campo y en la cudad. Me dijo levántate médico. que ha llegado una consulta de urgencias. Una vez me arreglé sali de mi aposento al consultorio, entró Brisitas y me dijo: -Esta consulta es una urgencia y la señora Martha ha traido un caballo para Usted y una mula resabiada para mí, porque a la paciente hay que ir a atenderle el parto allá en la hacienda-. No había nada que hacer solo obedecer, eran tiempos tan llaneros que hasta para matar un tigre había que fumar tabaco y nos montamos en las bestias, porque el asunto era casi llegando a la inspección de TRES TEJAS. Cerca a la finca de don Luis Antonio Castro, mi pobre caballo comenzó a dar bramidos lastimeros, pues para esa época ya empezaba este jinete a ser robusto, y pasando una quebrada, me fuí a hacia adelante, halé demasiado el freno y el caballito corcoveo y parado en sus dos patas me tiró al charco, cayéndose el instrumental del parto a la quebrada barrosa. Móntese y siga, que ese instrumental lo recuperamos mañana, dijo Brisitas. Llevas otro ? le pregunté, me dijo: No, traje uno limpio pero no esterilizado. Le respondí que eso era como tener mamá, pero muerta, a lo cual ripostó no sea así, que toda la vida se ha atendido partos y las esterilizadoras son un invento nuevo. Con ese frío y con esa lluvía doña Martha me dijo, permitame que lo formule Doctor y me pasa un trago de Aguardiente Llanero en un pocillo chocolatero lleno, que al instante me quitó el frío, me hizo arder la garganta y me encrispó todos los pelos. No había pasado cinco minutos de esa quemazón de garganta , cuando la señora Martha, se me enoja porque enseguida no tomaba otra "copita" de trago. Le dije señora, recuerde que voy como médico a atenderle un familiar y se me quedó muda, se dirigió a Brisitas diciéndole cosas al oído. Cuando llegamos a la hacienda, marcaba el reloj de mi pulsera, las tres y media de la mañana y al preguntarle donde estaba la paciente, me dijo doña Martha, dirijámonos al establo de enfrente. - Señora, como me va a tener usted la paciente en un establo (mi inocencia era pura) y me responde Brisitas: -Doctor es que la paciente es Rosita, una vaca de la señora Martha- Me acerqué al oído de Brisitas y le dije: Usted me trae para esto? me respondió en voz tenue: Doctor aquí en el campo toda consulta es consulta, no importa que sea humana o animal, ella es una de las 10 esposas del Comanadante Rosendo del VII Frente de las FARC y si no atiende este parto que le quedó grande a don José Mora, usted no vuelve a disfrutar de esas bellas y hermosas fiestas de San Juan y San Pedro en el Huila y menos probar de nuevo esos deliciosos biscochos de achira, ruegue que no vaya a quedar ni discapacitado ese becerro, porque ese Comandante es bastante malgeniado. Con el susto todo salió tan bien que si esa atención de parto no hubiese sido exitosa, de esta anécdota no se tendría ningún conocimiento.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
Sixto Alfonso Páramo Quintero
QUE HORROR, QUE HORROR, QUE.....
Que horror, que horror,
que...... patria tan malparida..
Los médicos somos los poetas del cuerpo,
los poetas son los médicos del alma,
soy poeta y soy médico
quiero curar los ojos
de la gente de mi patria
para que no derramen
las lágrimas de la violencia
de la guerra futil
de la maldita guerra
oscura del gobernante,
basta ya, pueblo irredimido
levanta tu voz
levanta tu herramienta
que es la única arma
del obrero vejado.
Fuera del poder
los capataces del terror
y pusilánimes del ogro del norte,
La tormenta sanguinaria
quiere otros cuatro años
para sus fauces asesinas
sin amor y dolidas.
Qué horror…qué horror
que patria tan malparida.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
EL MEDICO CARGATABLAS
Hoy día del médico, me ha visitado el recuerdo de una pintoresca anécdota, que resume el estigma legado que nace de la sencillez y de la solidaridad. Ocurrrió el primer día de mi llegada a la ciudad de San José del Guaviare, un 1 de septiembre de 1990. Ese día decolamos en el el Aeropuerto Capitan Jorge Enrique Gonzalez Torres, a la una de la tarde, fui recibido por el cuerpo médico del Hospital San José del Guaviare, su Director Miguel Angel Cerón Molina y el Jefe del Servicio Seccional de Salud Doctor Marco Alirio Riaño Olarte, después del almuerzo de recibimiento, me alojaron el el Hotel El Pórtico (después en la vieja CASONA), en ese tiempo su propietario era el Odontólogo Cancino, eran las 4 de la tarde y por el calor insoportable, decidí salir a conocer el cementerio de la ciudad, siguiendo una vieja enseñanza de mi padre, que sugería que cuando visitara un pueblo o una ciudad, lo primero que debía de hacer era conocer el cementerio, que al observar el arte de los mausoleos, se podía colegir o tener conocimiento de las familias mas poderosas y ricas, dada por la la belleza arquitectónica que estas obras ofrecen. Saliendo de este sacro lugar, vi pasar a un y enjuto viejo y cansado albañil, que cargaba solo, unas doce tablas grises por el uso y contacto con el cemento. Se mostraba agotado por lo cual me conmovió a ayudarle en su trabajo de transportarlas, al cual accedió sin premuras, no nos presentamos el uno al otro. Caminamos unas 15 cuadras hasta su casa en las afueras del pueblo, llegamos cansados y sudorosos, las calles resecas y rojizas por el verano, reflejan la luz candente del tórrido sol que ofendía los polvoriento ojos. La señora de la casa, joven y atenta me ofreció un vaso con jugo de mango, la vi muy joven y muy bonita para que fuera la esposa de mi nuevo mejor amigo albañil. Estaba bien vestido y me enmugré al socorrer con mi ayuda, la señora obedeciendo señas de su esposo, me trato de dar unas monedas a manera de pago, cosa quel no acepté.
Tres dias después, ya me hallaba en mi desempeño de médico rural, prestando mis servicios en Consulta Externa y en Urgencias. En la consulta programada, me llegó la señora esposa del albañil, la cual reconocí al instante, pero me hice el neutro, como quien no la conocía, como que era la primera vez que la veía. Ya terminando la consulta, la señora me dice que tiene la sensación de haberme visto antes, a lo cual respondí que era nuevo y que llevaba un dia trabajando tras la posesión de mi cargo. La señora seguía fija exclamando la idea de que mi cara le era conocida y luego como al recuerdo rápido como de un rayo, me dijo:" No, no lo he visto, pero en verdad que en este pueblo hay un tontico muy parecido a Usted, incluso trasantier le cargó unas tablasa mi esposo, hasta mi casa, fue tan bobo que no me quiso recibir algunas monedas". No pude quedarme callado, le dije: "Mi señora ese tonto que ayudó a cargar tablas a su esposo y que no te quiso recibir unas monedas y que bebió un vaso de jugo de mango ofrecido por Usted, yo lo conozco y es quien te ha atendido en el día de hoy".
La señora empalideció un poco, pero no mucho, me dijo que era de admirar esa actitud solidaria de mi parte, que eso refleja la calidad de la formación de los médicos de la facultad de medicina donde habia egresado. No se disculpó.
Al día siguiente, a la hora del almuerzo, la señora que nos servía la mesa, me dijo: "Hay en el pueblo un bisbiseo que dice que tu no eres medico sino un simple carga tablas o quizás unayudante de albañilería, que siembra duda pues parece imposible encontrar un doctor cargatablas, por estos lares".
El colmo no pudo ser más, la mayoría de la gente cuando solicitaba cita para consulta, expresaba que querían ser atendidos por el médico cargatablas.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
BOHEMIO SOY
Felíz áquel moribundo,
que en el profundo extasis,
brindó por la bohemia....
muerto del amor
consumado y consumido
por las doncellas,
perdió la vida
queriéndolas a todas,
Sin amar a ninguna de ellas.
Lo que no quitó el juego,
ni olvidó el vino,
ni los engaños anodinos,
pudieron los besos rojos
que decoran falaz
el orgullo masculino,
dilapida vida y corazón
entregàndose sin razòn,
inocente ante las bellas.
Bohemio soy
culpable del amor,
esclavo estoy
preso en tu alameda,
ya nadie nos enreda,
en las nuevas
y viejas fragancias
excepto tu curva húmeda
feroz incitante de mis ansias.
Sixto Alfonso Páramo Quintero
Suscribirse a:
Entradas (Atom)